domingo, 19 de noviembre de 2006

Andanzas del nagual


Además de su alma, cada persona tiene un nagual, su animal compañía que nace junto con ella y la acompaña hasta la muerte. El nagual puede ser un jaguar, un gavilán, un colibrí, una mariposa, una comadreja, una oruga o una culebra de agua, que en vez de cabeza trae un hacha, un machete, una tijera o, inclusive, un sartén de cocina. Las brujas puden tener varios naguales: remolinos de aire, el arcoiris, relámpagos, cometas. Durante los sueños los naguales se escapan y andan sueltos por el monte. Si algo le pasa al animal, su persona se enferma.

Las cantoras no se cansan de cantar. Aguantan fiestas de tres días con sus noches. Las conjuradoras suben el camino de la santa montaña para cantar a cada cueva. A cada ojo de agua. Siguen las andanzas del nagual con su canto. Pastorean las almas. Platican a la luna. Barren el cielo con su voz para que pueda caminar el Sol. Su palabra reúne las nubes, despierta la Tierra. Llena las ollas. Las bocas. Su aliento abraza a las Madres. Da a luz al mundo. Cantan. Del vientre del canto nace todo.

1 comentario:

FETICHES DE CARTÓN dijo...

Lo replico, me encantó, gracias!